Construir hábitos para la autonomía
La autonomía es una habilidad que se adquiere: A través de la construcción de hábitos organizativos, la definición de prioridades y la planificación de tareas, los estudiantes pueden elegir y crear un enfoque de trabajo que se adapte a sus particularidades, fomentando así una mayor autodeterminación en su desempeño.
Si bien a medida que progresan en su educación, los niños van desarrollando una mayor independencia en su trabajo;
La construcción de hábitos implica una secuenciación desde los primeros años de escolaridad y va articulando en los ciclos de la primaria, de manera de brindar herramientas para encarar las tareas con creciente autonomía. El objetivo es incrementar la competencia del alumno en la realización de una tarea y en la autovaloración, es decir, que los chicos sientan la satisfacción de haber logrado por sí mismos un objetivo. En el ámbito escolar, se espera que los estudiantes puedan cumplir con las consignas de trabajo, contar con los materiales necesarios, y ser partícipes de su evaluación para realizar los ajustes necesarios.
Individuos autónomos
La construcción de individuos autónomos requiere de un compromiso institucional; si bien en este artículo nos enfocaremos en la capacidad organizacional de los alumnos en cuanto a sus tareas a partir de cuarto año, la autonomía se construye sostenidamente en todos los espacios de la escuela, desde los hábitos de cuidado del cuerpo —incluyendo la alimentación y la higiene— hasta la resolución de un problema, la comprensión de un texto o la elaboración de un proyecto grupal. La escuela tiene una presencia táctica especial para formar seres autónomos en convivencia.
Autonomía en la Educación
Estrategias para crear buenos hábitos y rutinas en los niños
El cambio de ciclo
En el Segundo Ciclo de la primaria, el docente desempeña un papel fundamental en la construcción de habilidades y estrategias que permitan a los niños desenvolverse como estudiantes autónomos. Más que imponer estructuras fijas, se busca que los estudiantes adquieran variedad de procedimientos y metodologías para aplicar en diferentes situaciones.
Es esencial cuestionarse qué herramientas, estrategias y hábitos son necesarios para un mejor desempeño escolar. El docente guía la construcción de hábitos en el alumno, especialmente en el cambio a cuarto grado, donde se trabaja en el rol de estudiante. Reforzar y crear hábitos organizativos es vital en esta transición.
Informar a los padres sobre los objetivos de estas actividades y fomentar la autonomía en casa y en la escuela es clave. Los alumnos deben aprender a ser responsables de sus tareas y materiales, y no depender constantemente de los adultos. El trabajo conjunto entre la familia y la escuela es valioso para lograrlo.
La enseñanza de la responsabilidad y organización escolar es esencial. Es importante que los alumnos comprendan que los olvidos y errores son parte del aprendizaje. Promover la autonomía y la construcción de hábitos contribuye al crecimiento del alumno como estudiante y como individuo responsable.
Autonomía escolar
Planificar
La tarea docente enfocada en la autonomía requiere una planificación y seguimiento cuidadosos, ya que busca fomentar el pensamiento autónomo y la organización en los estudiantes. A partir de cuarto grado, se introducen técnicas de estudio para desarrollar estas habilidades y hábitos de organización, por lo tanto, la planificación de estas técnicas y la estructuración de hábitos cotidianos son esenciales.
La adquisición de hábitos se facilita mediante la realización sistemática de actividades. Los desafíos de convivencia espacial entre estudiantes también son importantes, especialmente al compartir escritorios entre zurdos y diestros, por ejemplo. A partir de cuarto grado, los alumnos enfrentan múltiples áreas de estudio, por lo que aprender a utilizar carpetas se vuelve esencial.
Otro de los temas importantes es el horario escolar, ya que es fundamental en la vida del niño. Tener un horario visible en el aula y en casa les ayuda a organizar sus actividades y materiales. Esto contribuye a que lleven consigo lo necesario para cada área. En definitiva, enseñar la autonomía y la organización es fundamental para el desarrollo de los estudiantes.
Algunos hábitos básicos que los alumnos deben desarrollar en su proceso de autonomía:
Útiles
- Sacar solamente los útiles que va a usar.
- Usar los útiles de a uno y luego de usarlo guardarlo en la cartuchera.
- Tener todos los elementos marcados con nombre.
- Traerlos en buen estado, listos para usar.
Carpetas
- Colocar datos en el margen de las hojas semanalmente para saber a quién pertenece y a qué área específica corresponde, en caso de que el docente requiera la actividad para su corrección, facilitará su guardado.
- Confeccionar un horario escolar en la primera hoja de la carpeta.
- Confeccionar un calendario mensual para registrar tareas y fechas de evaluaciones.
- Contar con folios para guardar apuntes.
- Controlar la cantidad de hojas necesarias para utilizar en la semana.
Mochilas
- Tener un lugar para cada cosa en la mochila.
- Establecer rutinas como armar la mochila antes de cenar o antes de irme a dormir, etc.-
Escuela, familia y discapacidad: Autonomía y autodeterminación
Registro de rendimiento
Un registro del rendimiento bimestral es un recurso que permite al alumno y a su familia divisar cuáles van siendo sus fortalezas o debilidades (dónde debe prestar más atención, qué aspectos sobre el cumplimiento debe reforzar, etc.), es decir, una planilla donde el alumno puede ir registrando junto a su docente actividades, tareas o desempeños del bimestre en curso. Es importante que el alumno sepa que su evaluación bimestral va a contemplar este aspecto y que no se tienen en cuenta sólo las evaluaciones escritas.
Para ello se realizará una tabla en la que el alumno irá anotando ciertas actividades y los aspectos de las mismas que serán evaluados.
FECHA | MATERIA | ACTIVIDAD | NOTA | DOCENTE | NOTIF. FAMILIAR |
5-3 | Prácticas del lenguaje. | Traer un cuento tradicional. | Cumplió. | ||
8-4 | Prácticas del lenguaje. | Presentación de carpetas. | Buena.
Revisar correcciones. |
Esto permitirá al alumno, al docente y a su familia evaluar y ajustar su rendimiento bimestral paso a paso. La familia y el alumno pueden ir estimando su calificación bimestral. El o la docente solo será veedor de los campos que se han completado. Al concluir el bimestre,se podrán analizar los registros de cada alumno.
Se puede trabajar en forma oral qué aspectos creen que deben seguir trabajando y en cuáles han progresado. El segundo bimestre se realizará una planilla similar pero en esta ya se harán divisiones entre las áreas que dicta el maestro de grado. En el tercer bimestre y en el cuarto se anexa el resto de materias en las que el alumno se desempeña, se pueden agregar las áreas idioma, tecnología, etcétera.
Clases especiales
Las pautas para que un alumno pase al frente a dar una clase a sus compañeros deben ser claras. Sobre todo si son sus primeras experiencias. Si el docente seleccionó el tema a trabajar, el alumno o el grupo asignado a este tema deberá buscar previamente información y seleccionar los subtemas que desarrollará en su clase y la secuencia para abordarlos. La información la puede obtener de variadas fuentes, que deberán estar incluidas al concluir el informe. El informe de lo que se expondrá puede entregarlo unos días antes al docente para recibir sugerencias y/o correcciones para que la exposición sea clara.
Orientaciones para la preparación de la exposición:
- En su casa deberá estudiar y apropiarse del tema.
- Practicar frente al espejo suele ser una práctica divertida y a la vez le permite al alumno observarse dando una clase.
- Algún familiar puede ayudarlo presenciando sus prácticas.
- Destacar la importancia de mirar a sus interlocutores mientras expone la clase, ser elocuente y captar la atención de sus compañeros.
- Debe saber que algunas cosas puede decir con sus palabras pero también debe respetar el vocabulario específico del área a trabajar, la claridad de conceptos y la veracidad de lo que está exponiendo.
- No debe exponer memorizando frases sino que debe explicar los temas que ha desarrollado en su informe, que podrá servirle de guía.
- Si realiza una lámina para la exposición, puede tener imágenes y un mapa conceptual. No es bueno llenar la lámina de información porque esto a veces hace que el alumno quiera leer lo que investigó y el objetivo de exponer se vea desdibujado.
Conclusión
Desarrollar en el Segundo Ciclo los hábitos de trabajo dirigidos hacia la formación de los alumnos como estudiantes será de vital importancia, ya que durante todo su trayecto escolar deberán aplicar variadas estrategias de organización.
Involucrar durante todo el año al alumno en la adquisición de hábitos le permitirá un crecimiento en un aspecto más amplio que el de su vida escolar y las actividades que se desarrollen para internalizar hábitos son para ellos.
La idea es que participen de la convicción de que estas estrategias simplifican la tarea cotidiana, les permiten ser más autónomos y desenvolverse en diversos contextos. Durante toda la escolaridad, hay posibilidades de ayudar a lograr la autonomía de los alumnos, si es considerada un objetivo y acción transversal.
Bibliografía
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