De dragones y otros entes extraños

Acercar a los chicos a la producción literaria de Jorge Luis Borges no es una utopía o un salto al vacío reservado para lectores privilegiados. Por el contrario, es una experiencia enriquecedora tanto para los alumnos como para el docente y, en ondas expansivas, se puede ir extendiendo al resto del entorno, tanto familiar como escolar.

 

«Obsesionado con la referencia de Las mil y una noches a la leyenda del «A Bao A Qu», el capitán Burton buscaba un dato que le permitiera descifrar cómo llegar a la escalera de la Torre de la Victoria…»

 

A BAO A QU
Jorge Luis Borges

Para contemplar el paisaje más maravilloso del mundo, hay que llegar al último piso de la Torre de la Victoria, en Chitor. Hay ahí una terraza circular que permite dominar todo el horizonte. Una escalera de caracol lleva a la terraza, pero solo se atreven a subir los no creyentes de la fábula, que dice así:

En la escalera de la Torre de la Victoria, habita desde el principio del tiempo el A Bao A Qu, sensible a los valores de las almas humanas. Vive en estado letárgico, en el primer escalón, y solo goza de vida consciente cuando alguien sube la escalera. La vibración de la persona que se acerca le infunde vida, y una luz interior se insinúa en él. Al mismo tiempo, su cuerpo y su piel casi translúcida empiezan a moverse. Cuando alguien asciende la escalera, el A Bao A Qu se coloca casi en los talones del visitante y sube prendiéndose del borde de los escalones curvos y gastados por los pies de generaciones de peregrinos. En cada escalón se intensifica su color, su forma se perfecciona y la luz que irradia es cada vez más brillante.

Testimonio de su sensibilidad es el hecho de que solo logra su forma perfecta en el último escalón, cuando el que sube es un ser evolucionado espiritualmente. De no ser así, el A Bao A Qu queda como paralizado antes de llegar, su cuerpo incompleto, su color indefinido y la luz vacilante. El A Bao A Qu sufre cuando no puede formarse totalmente y su queja es un rumor apenas perceptible, semejante al roce de la seda. Pero cuando el hombre o la mujer que lo reviven están llenos de pureza, el A Bao A Qu puede llegar al último escalón, ya completamente formado e irradiando una viva luz azul. Su vuelta a la vida es muy breve, pues al bajar el peregrino, el A Bao A Qu rueda y cae hasta el escalón inicial, donde ya apagado y semejante a una lámina de contornos vagos, espera al próximo visitante. Solo es posible verlo bien cuando llega a la mitad de la escalera, donde las prolongaciones de su cuerpo, que a manera de bracitos lo ayudan a subir, se definen con claridad. Hay quien dice que mira con todo el cuerpo y que el tacto recuerda la piel del durazno.

En el curso de los siglos, el A Bao A Qu ha llegado una sola vez a la perfección.

El capitán Burton registra la leyenda del A Bao A Qu en una de las notas de su versión de Las mil y una noches.

 

 

Jorge Luis Borges y el universo de la fantasía

La leyenda que circula habitualmente se refiere a las terribles dificultades que implica abordar el universo borgeano. Y, sí, las hay, pero el éxito o el fracaso de la tarea dependerán del criterio de selección de los textos y de la soltura y habilidad con que el docente guíe el acercamiento de los chicos a las ficciones del autor.
¿Qué elegir para comenzar a leer a Borges? El libro de los seres imaginarios es una excelente opción porque se trata de una antología en la que Jorge Luis Borges, con la colaboración de Margarita Guerrero, recrea la fauna fantástica que ha poblado la mitología y las religiones. El propio autor explica que han «compilado un manual de los extraños entes que ha engendrado a lo largo del tiempo y del espacio, la fantasía de los hombres».
Y, como los chicos están bien duchos en esas cuestiones vinculadas con la zoología fantástica, van a entrar en ese mundo caleidoscópico con total naturalidad.

 

Acerca del autor

Jorge Luis Borges nació en Buenos Aires en 1899 y murió en Ginebra en 1986. Poeta, escritor y ensayista argentino, entre sus primeras obras figuran Cuaderno San Martín y Fervor de Buenos Aires, que ya evidencian renovación y originalidad en el tratamiento de temas tradicionales. En sus obras posteriores cultivó una literatura imaginativa, no exenta de inquietudes filosóficas: Inquisiciones, Historia universal de la infamia, El Aleph, etc.
Fue director de la Biblioteca Nacional y miembro de la Academia Argentina de Letras.
A Bao A Qu, al igual que muchos de los relatos compilados en la antología elegida, es muy recomendable para trabajar en el aula a partir de 4º año/grado.

 

Propuesta de lectura

Después de una lectura minuciosa y acá se impone el buen criterio del docente, ya sea a cargo del maestro o de los propios alumnos, se propone comentar libremente el relato. Si hay poca participación, se la puede estimular, haciendo referencia, por ejemplo, a la secuencia narrativa (¿qué se cuenta?), a las características de ese extraño ser llamado A Bao A Qu, como se ejemplifica en la Ficha 1.
También contribuye a la formación de prácticas lectoras el desarrollo de la capacidad de observación. En este caso, señalar la fuente, es decir, dónde se registra la leyenda.

 

 

 LOS ELFOS
Jorge Luis Borges

Son de estirpe germánica. De su aspecto poco sabemos, salvo que son siniestros y diminutos. Roban hacienda y roban niños. Se complacen asimismo en diabluras menores. En Inglaterra se dio el nombre de elf-lock (rizo de elfo) a un enredo del pelo, porque lo suponían obra de Elfos. Un exorcismo anglosajón les atribuye la malévola facultad de arrojar desde lejos minúsculas flechas de hierro, que penetran sin dejar rastro en la piel y causan dolores neurálgicos. En alemán, pesadilla se traduce por Alp, los etimólogos derivan esa palabra de elfo, dado que en la Edad Media era común la creencia de que los Elfos oprimían el pecho de los durmientes y les inspiraban sueños atroces.

 

Propuesta de lectura

Los elfos es un texto muy atractivo porque se relaciona con muchas películas, especialmente las vinculadas con la producción literaria de J. R. R. Tolkien y de C. S. Lewis. Luego de una lectura atenta, se podría proponer a los chicos que averigüen algunos datos sobre los autores citados.

Borges era un gran admirador de Lewis y en su homenaje incluyó en la antología un relato llamado «Un animal soñado por C.S. Lewis»  Compartí ese relato con tus estudiantes.

 

En las fichas que acompañan este artículo se presentan también propuestas de escritura a partir del relato.

En síntesis, El libro de los seres imaginarios contiene la descripción de ciento dieciséis monstruos que han poblado las mitologías y las religiones. Algunos, como el Golem, la Esfinge y el Centauro, pertenecen al mundo de la metafísica o de la literatura; otros son ya célebres en la invención humana, como los Gnomos y las Hadas.
Y en la contratapa de la edición de Emecé, el poeta Carlos Mastronardi escribió con admiración: «Los animales gloriosos que pueblan este hermoso libro son reales en cuanto los engendra la admiración, el temor o el apetito de magia que alienta a los hombres».

 

 

 


Descargá, en formato imprimible, Fichas de propuestas de trabajo con estos relatos fantásticos.