Las formas de representación, un medio para comunicarse y expresarse
La influencia de códigos exteriores, de estereotipos, de multitud de imágenes de gran penetración se advierte gradualmente en las producciones artísticas de niños y niñas. Una actitud abierta, partir desde esta realidad, reflexionar junto con ellos, y fomentar una visión crítica de estos personajes los ayuda a discriminar entre ficción y realidad, y los puede guiar en el camino de encuentro con su propia poética comunicacional.
Presentamos una propuesta en la que se trabaja sobre el eje «la figura humana», que tiene como objetivo estimular la construcción de imágenes percibidas, imaginadas y fantaseadas. Se observa en los alumnos una tendencia a desvalorizar producciones que no respondan a un tipo de imagen naturalista y cierta dificultad para aceptar distintas posibilidades expresivas en la representación plástica.
Intenta ayudar al alumno a ejercitar comportamientos creativos, tratando de emprender experiencias conducentes a promover situaciones que permitan, por su propia índole, la adquisición de conceptos sobre códigos del lenguaje plástico, por ejemplo: la forma, la línea o el color.
Una producción artística que resulta desde el saber, ausente de contenido sensible, deja de ser arte, aunque se trate de un trabajo infantil. El conocimiento de los códigos del lenguaje plástico constituye saberes sin proyección, cuando esas líneas o formas no se convierten en portadores de vuelos imaginarios, de fantasías o de relaciones emocionales. En el arte infantil los saberes están imbricados en la sensibilidad del niño.
Objetivos
- Expresar la vinculación de la figura humana con el medio, significando la acción en el lugar y el tiempo.
- Estructurar las constantes perceptuales del objeto.
- Favorecer el desarrollo de la función simbólica.
- Expresar imágenes interiores con precisión y claridad.
- Expresar la vinculación de la figura humana con el medio, significando la acción en el lugar y en el tiempo.
- Fomentar el goce y el reconocimiento del color.
- Descubrir la vinculación de lo real y la línea que lo representa en el plano gráfico.
- Desarrollar una progresiva sensibilidad hacia la forma, el color y el espacio.
- Generar confianza en sus posibilidades de plantear y resolver problemas a través de la expresión artística.
Contenidos
La figura humana
- Forma. Proporción (relación menor, mayor, igual, semejante).
- Yuxtaposición, superposición y penetración de formas.
- Anticipación de sus modos de realización de acuerdo con los distintos materiales.
- Descubrimientos de espacios internos o externos que delimitan las formas.
- La información sensorial.
- Percepción (la información del mundo exterior, las emociones).
- La línea.
- El espacio.
- El color. Experimentación.
- El tratamiento de la figura en representaciones de diferentes artistas plásticos.
Actividades
Se abordará el tema organizando las actividades en tres momentos.
Primer momento
El docente propone a los alumnos que realicen una composición libre en la que puedan proyectar las figuras de personas, con la intención que deseen, con ciertos señalamientos conducentes a imprimir en el trabajo un código determinado del que ellos se apropiarán libremente (aclarar que la idea es que no refiera a la imagen figurativa real o fotográfica o a una representación mimética).
Realizarán bocetos, rápidos, observando del natural (clase de Educación física, ellos mismos o los propios compañeros), atendiendo a una visión del todo, de la forma general, del movimiento de ese cuerpo en el espacio, sin detalles, explorando desde el juego lineal las relaciones de tamaño, parte / todo (proporcionalidad) y sus variaciones: agrandando, torciendo, exagerando, geometrizando o estilizando las formas, en bocetos rápidos, según su posibilidad e intencionalidad expresiva.
Les ofreceremos hojas grandes, distintos soportes, hisopos, tintas de colores, carbonillas, pasteles, pincel directo (de distintos grosores); descartar el lápiz negro y la goma, ya que la actividad apunta a lograr soltura en su expresión.
El experimentar con el color directo, dibujando con pincel o hisopos, permitirá a los alumnos en un principio delimitar un espacio en el plano dando origen a una forma más expresiva, más gestual, atendiendo a las características de una figura pensada por ellos. El niño se enfrentará a distintas preguntas: «¿Cómo es? Si se encuentra en un plano cercano, ¿se verá más grande? ¿La dibujaré de cuerpo entero? ¿Sólo su rostro? ¿Ocupará un espacio mayor en mi hoja? ¿Puedo ubicarla en algún lugar? ¿Dónde está?»
La idea es que cambien de soporte y los trabajos se resuelvan en poco tiempo, de esta manera el niño utilizará nuevos recursos en el próximo, o transformará una dificultad. «¿Una forma o mancha puede ser una sombra?» «Si dibujo sobre lo dibujado, ¿qué pasa?» «¿Puedo superponer un frente y un perfil?», y así sucesivamente.
El uso de pintura o tinta directa permite explorar, combinar y seleccionar el color. Si es un color local o real, el alumno tendrá que investigar y mezclar para obtener el color piel, el marrón para los ojos, el tono del cabello, la ropa verdadera. O se preguntará si puede usar el color libremente. Jugar, probar a usar el color de una manera distinta de la de siempre y ver cuál es el resultado si usa colores tranquilos y claros o puros, o fuertes y violentos.
El docente también puede trabajar la técnica de collage. Si el alumno lo desea, inventa un fondo para la figura representada, no con la intención de decorar su trabajo sino seleccionando aquél que pueda relacionar y combinar la figura con el fondo.
Otra instancia es representar una figura en movimiento en el espacio no plano primero dibujando en el plano sólo la silueta, el contorno, atendiendo sólo a la proporción y luego trabajarla en relieve, con papel mache –esto lleva dos clases, para que seque la mezcla de cola, pequeños rollos de papel diario y papel tisú–.
Finalmente se pinta, se buscan en revistas fotos de caras y manos, que guarden relación con el tamaño de la figura representada.
Segundo momento
Presentamos reproducciones de artistas donde la figura humana ha sido tratada de maneras distintas y opuestas entre sí. Por ejemplo, Munch o Nolde y su patente expresionismo; Botero y la monumentalidad en sus personajes; Picasso, quien combina pintura con fragmentación, geometriazación y los diferentes puntos de vista de una figura; Bacon y la deformidad de sus rostros; De Kooning y el trazo rápido y vigoroso de sus retratos; el Grupo Cobra, que representa figuras sólo con la fuerza del color y el gesto.
Compartí con tus estudiantes estos videos para acercarlos a los pintores sugeridos.
- «El expresionismo alemán de Emil Nolde https://www.facebook.com/watch/?v=749214908617071»
- «Zamba: Excursión al Museo de Bellas Artes – Fernando Botero Botero»
- «Willem de Kooning (1904-1997). Expresionismo abstracto»
Los alumnos observarán que los artistas plásticos no se limitan a la representación estereotipada o figurativa, que presentan otra forma de representar.
Esto permitirá que el niño no se limite a la representación estereotipada y busque otras formas de representación. No significa dejar de lado el uso espontáneo de la forma o el color, por el contrario, se trata de sumar riqueza a lo propio y explorar esta posibilidad en los saberes del lenguaje plástico, tomando como antecedente a los maestros de la pintura.
Se realiza una lectura conjunta de las imágenes donde se apunta a la observación, análisis, y comprensión de las «formas» de representación, a través del diálogo e intercambios de opiniones sobre las obras presentadas. El docente evalúa el sentido crítico de los alumnos y sus saberes previos.
Se induce a que los alumnos respondan sobre las características de las distintas figuras humanas: el tratamiento de las mismas –estilizadas, rellenas– figuras apenas dibujadas con trazos rápidos y enérgicos, usando sólo líneas o pinceladas de color. El docente estimula todo tipo de comentario acerca de la figura y el fondo, y hace que los alumnos analicen si hay exageración en la proporción, el gesto, etc. Los chicos formulan hipótesis sobre los personajes, qué «suponen» sobre ellos.
En esta primera lectura acordar y consensuar con el docente a cargo criterios estéticos y contenidos actitudinales que refieran a la identidad, analizar qué prejuicios están en juego, tanto en lo corporal como en lo social, descubrir y reflexionar acerca de las contradicciones que se presentan en la construcción de estos conceptos.
La intención de esta propuesta es fomentar comportamientos creativos, estimular al alumno en la realización de su propia figura humana. Cualquier intento será lícito y toda dificultad podrá ser superada; se trata de despertar la curiosidad y no descartar los deseos de manifestar con las formas y los colores un enfoque distinto de la realidad, pero recreado desde su imaginario.
Tercer momento
El trabajo se cierra con una evaluación o autocrítica y con la conversación sobre el desarrollo del proceso. El docente deja a criterio de los alumnos la realización de una muestra y planifican ajustes y cómo seguir explorando las múltiples visiones expresivas de la figura humana.